El Pallars tiene una climatología de influencia claramente mediterránea hasta los 1.500 m. A partir de esta cota nos encontramos con un clima alpino.

Las alturas, las diferentes vertientes del relieve abrupto y este clima, configuran una vegetación con cinco niveles distintos: el basal (de los 600 ma los 1.000 m), con encinas y robles, el montano (los 1:000 m a 1.600 m), con robles , hayas, abetos y pino rojo, el subalpino (de los 1.600 ma los 2.200 m), con pino negro, y el alpino (los 2.200 m a los 2.800 m), con pastos, y el nival (a partir de los 2.800 m), con poco herbaje y mucha roca.

Mucha parte de la superficie que rodea los pueblos la conforman todavía los prados, a pesar del claro retroceso del sector agrícola.

Hay bosques de renombre como el abetar de la Mata de Valencia, el bosque de Virós y de Bonabé, los abedules de Ancs y Baiasca, etc.